jueves, 25 de mayo de 2017

quién me ayuda



Hace algunos días escribí un texto sobre El campeón existencial de Ana Inés López. Lo leí en un congreso sobre poesía y estuvo bueno porque además de hablar del libro de Ana, hablé de los blogs. Dije ahí que los blogs languidecieron porque ya no sé quién entra a este blog a los blogs en general
A veces creo que nadie, entonces dejé de escribir en blog
Empecé a escribir en unos cuadernitos coquetos que compré en Nueva York
Pero también dejé de escribir ahí porque me trasmitían mucha frialdad
De un momento a otro pasaron los meses y no estaba escribiendo en ningún lado
Tampoco en celular porque viajo muy poco en colectivos
Empecé a sentir terror y comencé  a tuitear todo el día con la esperanza de que eso se transformara en escritura
Pero tampoco pasó
Entonces sin saber muy bien qué hacer escribo este post nuevo
Para ver si se me ocurre una idea
A veces pienso que debe ser por el momento
Decidí que me tenía que recibir y me puse las pilas
Y tengo que leer cosas sin ganas
Pero no puedo decir que dejé por eso.
Quizás antes que termine el año
Deberíamos ir todos a una isla, prender una fogata
Y charlar sobre la escritura
No hay que dejar que pierda el sentido
Estoy dispuesta a no permitirlo jamás
Quién me ayuda?

5 comentarios:

  1. Los blogs languidecieron porque languideció toda forma de usar la web hacia afuera.
    Antes, hace no mucho, grababas un video y era para subirlo a Youtube; después fue para "compartir" en Facebook; ahora es para mandar por Whatsapp.
    Antes, hace un poco más, subías una foto al Fotolog, y era para el afuera; cualquiera podía pasar por ahí. Principalmente tus "effes", pero cualquiera podía verte. Ahora se suben miríadas de fotos a Facebook, donde sólo las pueden ver quienes sean tus "amigos" o los que vos quieras, y si tienen ganas de detenerse a ver algo entre tanto material. O, de nuevo, para mandar por WhatsApp, donde directamente no se ven, se pasan como figuritas repetidas.
    Pero, siempre, dentro del mundo de gente que ya conocés, ante el cual inevitablemente uno busca reafirmar lo que ya es para ellos.
    Los blogs son, quizá, una forma de resistencia ante la endogamia de estos nuevos cosos; y una forma de resistencia ante la cada vez mayor velocidad e intensidad de estímulos.

    O capaz que todo esto es pura sarasa justificadora de mi no tener WhatsApp y ahora tampoco Facebook. Yo qué sé.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. también me fascina ese mundo nuevo y me llena de paranoia

      Eliminar