viernes, 30 de mayo de 2014


leí en un libro que la poesía es miel
pero para mi amiga Florencia
la poesía no es miel
es mermelada


martes, 27 de mayo de 2014

ROBAR

27/05/2014 22:08:01

Hoy robé en el supermercado. Robé un kinder sorpresa color rosa. Lo iba a pagar pero ¿por qué pagar si se puede robar? Nadie lo notaría en el bolsillo de esta campera que parece una frazada. Seguí comprando más cosas y seguí pensando en robar: salsas ranch de 40 pesos, papas importadas, carne, más golosinas. Cuando salí por la puerta el guardia de seguridad estaba muy distraído mirando para cualquier lado. Los guardias de seguridad dejan de estar receptivos a las ocho de la noche. Están pensando en volver a sus casas para tomar y comer lo que se robaron durante el día. Las  góndolas son accesibles y ofrecen algo para todos. Los empleados del supermercado también le roban al supermercado. Y yo clienta inconstante puedo robar, participando del mismo circuito.  

Hoy también renuncié al colegio. Cuando estaba esperando en dirección (me hicieron esperar una hora) casi robo un libro de alfaguara gordo y celeste de 100 años de poesía argentina. Cuando estaba en preceptoría cerrando las notas de trimestre quise robar dos microfibras. La preceptora me dijo que yo no estaba preparada para lo docencia “en otras escuelas le dan tijeretazos a los profesores o les cortan la cara y vos acá te quejás de nada”. Cuando dijo eso le quería escupir la cara pero me contuve. Entonces le dije “Chau Alejandra que te vaya bien”. Y comprendí que Alejandra (avón) era como uno de los tantos muebles del colegio y que ya fue. Me fui repitiendo “no tenés que pelear más, no tenés que pelear más”.

lunes, 26 de mayo de 2014



"Estamos jugando estos juegos mentales juntos
Jugando a la guerrilla mental"
(transcribimos letras de canciones y escuchamos el mismo disco cinco veces)
merendamos todas las tardes de invierno en burger king
el mejor lugar 
en todo el planeta tierra





domingo, 18 de mayo de 2014

18/05/2014 14:37:45

Tengo 24 años y no pienso en la maternidad. Mi mamá me tuvo a los 24 años y siento una especie de imposición que viaja a través del tiempo. Mi mamá es joven, se cortó el pelo como varón y es fanática de las novelas brasileñas. A veces nos cruzamos en la calle y es como cruzarse con una ex compañera de la secundaria. Es la persona más buena y justa del planeta. En la familia de mi mamá las mujeres son excesivamente serviciales y justas. En otra época podrían haber sido santas o mártires. Todas las mujeres de la familia de mi mamá tienen una locura tranquila. A veces se quedan mirando un punto fijo y jamás pueden decir la palabra “no”. 

viernes, 16 de mayo de 2014

La violencia


Bueno, puedo escribir muchas páginas sobre la violencia, como la que escribí ayer en el cuaderno de aula:

 “La alumna k empujó al alumno N que cayó sobre los bancos. Yo estaba presente. Más tarde ese mismo compañero le arrojó una cinta de papel en la cara a un chico apodado “Caramelo”. Caramelo lloró y esto provocó la burla cruel del resto de los chicos. Yo estaba presente. Cuando quise intervenir en el hecho, el alumno N –que siempre fue muy cariñoso- me dijo que su mamá me iba a dar unos tiros a la salida. Le dije que repitiera la frase frente al curso y no quiso. Todos le gritaron "cobarde" y "cagón". Notifico sobre esta situación que cada día es peor. No es particular sino que se manifiesta en todos y cada uno de los chicos y chicas. A veces vienen así".

jueves, 1 de mayo de 2014

01/05/2014 17:40:12


Hoy es el día del trabajador pero no pienso en el trabajo. Ya hace unas semanas vino el hermano de Ro de Italia para casarse con su novio Simone. Ayer fue el casamiento. Varios civiles se desarrollaron durante la mañana. La realidad es que me sentí un poco mal vestida. Sentí que estaba vestida como una señora. No podía dejar de mirar a  una chica estaba vestida un poco puta y me pareció que su look era el mejor: bucaneras, moño, vestido de terciopelo rojo, pelo de colores. Yo pensaba que los casamientos eran más serios. No me di cuenta. Ahora que lo pienso mejor, sentirse bien vestido es una cuestión de confianza en uno mismo y nada más. Ayer a  la noche fuimos a una fiesta con Agustina y su amiga Renata. En el auto fumamos cigarrillos y hablamos sobre la adolescencia, sobre lo que significaba transar. La fiesta era en un lugar que se llama Copa Lange. Un lugar muy feo con patovicas con la cara cortada. Nos pidieron documentos, algo del pasado. Los barman eran mala onda y todo era medio caro. Ya no sé si las cosas son baratas o caras pero salir cuesta una fortuna. Bailamos un rato, había una competencia de baile. Después empezaron a pasar música electrónica muy monótona que solo funciona cuando estás drogado y ni eso. A mí me aburre chan chan chan chan. Me martilla el cerebro. Empezó a caer gente con la cara dura y cortada por la mitad y me dio mucha sensación de suciedad y me quise ir. Hoy a la mañana el día estaba re lindo y salimos a pasear por el puerto. Pasamos a buscar al hermano de ro y al novio que solo habla italiano. Durante el viaje hablamos sobre los tiempos verbales y los idiomas: condicional, pluscuamperfecto. Hay una conversación que no podemos eludir desde que llegaron y que ya me está agotando: el euro y el peso. Acá una tele vale tanto y en Italia vale menos, entonces el sueldo rinde más. Me parece un tema muy abstracto. Cuando opino sobre esas cosas siento que estoy hablando sin pensar. La verdad es que no me interesa el cambio del euro al peso, ni del peso al euro. No creo que vaya a Europa en mucho tiempo. No me importa si las cosas que se venden en mi país son de mala calidad, ya fue eso. Últimamente siento que la ciudad está pasando por un momento de oscuridad, o más bien está como paralizada. A pesar de que el día estuvo lindo, estuve todo el día en casa leyendo, bailando, escribiendo, y jugando con el gato.